El cadáver tendido en el suelo, arremoliba a su alrededor a un grupo cada vez más numeroso de personas. Al lado los tiovivos de las ferias de ese año, condensaban a un gran número de niños, era la contradicción más absoluta. La policía iba llegando mientras uno de los viandantes, q se acerco bastante al cuerpo, advertía la presencia de un frasco en la mano del muerto.
Lo cierto es q no murió envenenado, había caído desde un quinto piso, se había suicidado o lo habían tirado. Nada se sabía por el momento, to be continued...
Monday, December 29, 2008
Thursday, December 25, 2008
El amor estaba escondido
como la almendra en la corteza.
Agazapado suavemente,
circulando cálidamente.
Y era preciso detenerlo,
paralizarlo, congelarlo,
encadenarlo en líneas, ritmos,
desarraigarlo de su tránsito,
darle bulto, darle reposo,
encerrarlo en unas figuras
que no sean hija ni madre,
sino materia del amor,
sino parpadeo de estrella
que no se extingue nunca. Llama
salvada de su acabamiento,
hecha presente para siempre.
"Cuaderno de Nueva York"
José Hierro
como la almendra en la corteza.
Agazapado suavemente,
circulando cálidamente.
Y era preciso detenerlo,
paralizarlo, congelarlo,
encadenarlo en líneas, ritmos,
desarraigarlo de su tránsito,
darle bulto, darle reposo,
encerrarlo en unas figuras
que no sean hija ni madre,
sino materia del amor,
sino parpadeo de estrella
que no se extingue nunca. Llama
salvada de su acabamiento,
hecha presente para siempre.
"Cuaderno de Nueva York"
José Hierro
Subscribe to:
Posts (Atom)